El Señor te bendiga en este 5 de junio del año 2024, en esta oportunidad para orar por ti, por tus huesos, mediante el Espíritu de Dios. Así que directamente vamos a comenzar esta ministración profética orando al Padre para que sea Él manifestándose a través de esta boca en esta transmisión. Amén.
Amado Padre celestial, Rey de gloria, Rey de majestad, Rey eterno, bendito Dios, Salvador perfecto, Sanador perfecto, nuestro médico, el cual acude a auxiliarnos cuando estamos rotos, enfermos, pecando y quizás, sin darnos cuenta, que generamos daño en nuestro cuerpo. A ti venimos hoy, Señor. Venimos por tu ayuda, Padre, porque hay enfermedad en nuestros huesos, porque nuestros huesos están sufriendo por distintas razones, están debilitados, porque han sido afectados por brujería, en algunos casos, porque están afligidos y están sin fuerza.
Oh, Señor, venimos a ti, porque necesitamos, Padre, que derrames de ese aceite de sanidad en nuestros huesos. Y por eso estamos aquí hoy, Señor, porque Tú me has dado este tema específico para orar por ellos, oh Dios mío, por el Espíritu Santo de Dios, de una manera profética. Y, Señor, yo, Noelia, te presento ahora mismo a todas estas personas que vienen a congregarse conmigo en esta reunión profética, para que sea el derramamiento de tu Espíritu sobre ellos, para que sea el derramamiento de tu aceite de sanidad sobre ellos; porque sólo Tú sanas y sanas completamente, porque sólo Tú salvas, porque todas las buenas cosas vienen de ti y únicamente de ti, Señor. Tú eres nuestro Padre, Tú eres nuestro Rescatador, y a ti venimos hoy, Señor, a presentarnos delante de tu Trono, Señor, para ser sanados y para que nos hables los misterios que hoy quieras hablar, para que reveles esos misterios que hoy quieres revelar acerca de nuestros huesos.
Estamos aquí para escucharte, Señor, para entender, abre nuestro entendimiento, abre nuestros corazones, como abriste, Señor, el corazón de Lidia para recibir la Palabra que le estaban hablando. Hoy, Señor, destápanos a aquellos vasos que estamos tapados, Señor, y que por causa de ese bloqueo no podíamos recibir lo que querías derramar en nosotros, ábrenos Señor, quita todo bloqueo de nosotros que quiere impedir recibir esta oración profética, sanidad, liberación, revelación, este pan del Cielo. En ti confiamos, Padre Celestial, y a ti acudimos en este momento, ya sea que escuchamos esta palabra en vivo o en diferido, porque la Palabra actúa igual para el que tiene fe, nada es imposible para ti, Señor, te damos la gloria y la honra en el poderoso nombre de Cristo Jesús, amén.
Yo les aviso desde antes de comenzar, que mientras esté orando por ustedes de manera profética, es decir, orar por inspiración del Espíritu Santo, lo que Él me vaya mostrando, lo que Dios quiere que ore, y mientras yo ore, el Señor me va a estar entregando palabra de ciencia y revelaciones sobre las enfermedades que afectan a los huesos, sus posibles causas, y el Señor también va a dar palabras de sabiduría. Estoy hablando de que voy a estar aplicando diferentes dones de revelación, los cuales están nombrados en 1 Corintios 12, a donde se nombra, por ejemplo, don de profecía, don de sabiduría, don de ciencia o conocimiento también, le llaman distintas escrituras, dones de sanidades.
Voy a estar interpretando mis lenguas para recibir información del Cielo. Voy a estar aplicando don de discernimiento de espíritus, fe, milagros, y de a poco el Señor va a ir entregando palabras que les recomiendo anotar, como siempre les digo, porque esta información son como bocados de pan que el Señor envía desde el cielo para ustedes, para sus hijos, para que sean entendidos de las cosas espirituales en un nivel mayor y ya no sean ignorantes de ellas.
Y yo ya estoy viendo, en primer lugar, a alguien que tiene las manos, los huesos de las manos, se van deformando. ¿Cómo se llama esta enfermedad que va deformando las manos? Que como que los huesos se van torciendo y van quedando como endurecidos. Artritis. El Espíritu Santo me está revelando que en algunas ocasiones, la artritis está provocada por un demonio de enfermedad que habita en las manos de la persona que está afectada por esta enfermedad. Por lo cual, a veces, hay algunos hermanos que oran para sanidad por alguien que tiene una enfermedad y esa persona no se sana. Es decir, a veces, la sanidad no se recibe, no se da sobrenaturalmente, aplicando los dones de sanidades, porque la solución para algunas enfermedades es liberación y no oración de sanidad.
Son dos cosas distintas que trabajan en conjunto, que tienen que ver con lo mismo, pero que a su vez, se ocupan de dos áreas diferentes. Una cosa es la sanidad y otra es la liberación. Pero, a su vez, hay sanidad que se da a través de la liberación y hay liberación que abre el camino para la sanidad. Porque, al echar afuera ese demonio que provoca esta enfermedad, cuando la enfermedad está provocada por un demonio, entonces, la enfermedad se va junto con ese demonio. Es decir, a veces nosotros oramos para sanidad, pero la solución a nuestra enfermedad no siempre, aunque sí, a veces, es la sanidad, sino la liberación. Porque hay distintas causas para las enfermedades y una de las causas por las cuales una persona puede estar enferma es por causa de un demonio que provoca esa enfermedad.
Y hay algunos casos, estoy sabiendo yo ahora por el Espíritu Santo, que la artritis está provocada por falta de liberación, es decir, por un demonio. Y, en ese caso, la persona que tiene esta enfermedad necesita liberación, necesita que ese demonio sea echado afuera. Amén. Y estoy sabiendo que uno de los ejemplos de los casos por los cuales este tipo de géneros puede ingresar en una persona y provocarle una enfermedad como la artritis, en donde, por ejemplo, las manos se van deformando de cierta manera, puede ser por el pecado de robar.
Una persona que utiliza sus manos constantemente para robar y no se arrepiente, puede abrir la puerta a un demonio de artritis en su vida porque las manos de esa persona se están utilizando para la maldad, para la injusticia, para el robo. Por lo tanto, los demonios tienen autoridad o, mejor dicho, derechos legales sobre esas manos que están sucias y manchadas de pecado. Entonces, un demonio puede entrar a habitar en las manos de una persona que, por ejemplo, es un ladrón, una ladrona y no se ha arrepentido y provocarle una enfermedad como la artritis.
Es una de las causas que puede darse. Ahora, antes de continuar, quiero aclararte y que tengas muy, muy presente que las cosas que voy a mencionar durante este vivo son algunas razones de ciertas enfermedades que afectan a los huesos. No estoy diciendo que siempre la artritis está provocada por un demonio y tampoco estoy diciendo que siempre la artritis está provocada por un demonio porque la persona robó. No estoy diciendo que siempre, siempre, siempre la artritis su causa es que la persona ha robado. No. Lo que estoy diciendo es que es una de las posibles causas por las cuales esta enfermedad se puede dar. ¿Se entiende? Porque, vuelvo a repetir, hay distintas razones por las cuales una persona puede estar enferma y no siempre es por pecado y no siempre es por falta de liberación.
Hay muchas distintas razones. Los que vienen siguiendo este canal desde hace mucho tiempo, desde estos años que estamos ministrando al pueblo, saben que yo muchas veces he hablado sobre las enfermedades y hay varios videos colgados en este canal que hablan sobre las enfermedades, sobre algunas posibles causas y he dicho que no todas las enfermedades son provocadas por pecado, que no todas son provocadas porque hay un demonio que tiene que ser echado afuera, pero sí es una de las posibilidades y lo que yo voy a hablar son los ejemplos que el Espíritu Santo me va trayendo a mi espíritu para que yo se los comparta a ustedes.
Yo estoy sabiendo ahora, dejado esto muy en claro para que lo tengan en cuenta y aprendan a no categorizar todas las cosas tan rápidamente, porque para que ustedes no digan: «tal persona tiene artritis entonces ha robado», no funciona de esta manera. Me explico, ahora dejado esto en claro, es más, ustedes pueden ir y hacer un paseo bíblico e investigar y la Biblia menciona muchas distintas razones por las cuales las personas estaban enfermas y no siempre cuando alguien estaba enfermo hizo falta echar afuera el espíritu demoníaco para que la persona sea sana, a veces simplemente el discípulo, el apóstol o el mismo Jesús oraba para sanidad y la persona era sana, pero a veces la persona no era sana si no se echaba afuera ese demonio que habitaba en la persona provocando la enfermedad.
Entonces no categoricemos todas las cosas tan rápidamente, así porque sí, porque el Reino de los Cielos es muy vasto, las cosas espirituales son muy amplias y no hay una sola razón para todas las cosas, no siempre, ¿de acuerdo? Entonces, alabado sea el Señor, seamos maduros en las cosas espirituales y escuchemos primero y oremos sobre todas las cosas que voy a hablar hoy y más que nada investiguemos en las Escrituras lo que yo, Noelia habla, ¿de acuerdo? La gloria sea para Dios. Ahora, dicho esto, aclarado esto, que por favor les pido que lo tengan muy en cuenta, voy a continuar con lo que el Espíritu me habla.
Otra de las razones por las cuales yo estoy sabiendo ahora que una persona puede tener enfermedades en los huesos, en las manos, específicamente hablando, es la codicia, el pecado de la codicia, porque las manos son utilizadas para manejar bienes, para administrar dinero, para recibir dinero o para dar dinero, para trabajar, lo cual produce bienes materiales.
Entonces, ¿con qué tienen que ver las manos? Ustedes saben que este ministerio, una de las tareas que tiene es enseñar al pueblo a pensar simbólicamente porque Dios se maneja muy simbólicamente, no siempre, vuelvo a repetir, a veces es muy claro y no hacen falta hablar a través de la simbología que Él utiliza, sino que dice las cosas clara y directamente y no hace falta interpretar nada, pero no es una regla general, Él a veces es muy simbólico, muy metafórico. Entonces, tenemos que aprender a pensar de manera simbólica, porque Él habla en gran manera, en gran porcentaje de manera simbólica, metafórica. Entonces, si nosotros pensamos en las manos, ¿para qué se utilizan? En la vida normal, para una gran cantidad de cosas, ¿verdad? Pero una de esas cosas es para trabajar.
Las manos suelen representar trabajo, en los sueños inclusive, servicio. Con las manos trabajamos y, dice, con nuestras manos nos ganamos el pan. Se utilizan este tipo de dichos cuando hablamos inclusive. El mal manejo del dinero, la codicia, el querer obtener más, este pecado, que puede ser generacional o personal, únicamente de la persona, pero que no viene arrastrado en su generación, si no es tratado, llega a un punto que puede abrir la puerta.
¿Para qué? Para abrir la puerta a una enfermedad en esas manos y provocar, por ejemplo, una artritis, una enfermedad en los huesos. Porque la artritis, lo que hace, si bien tengo entendido, es deformar las manos. A la larga los dedos se van endureciendo, deformando, poniendo duros y esto, me habla el Espíritu Santo ahora, refleja la dureza del corazón de una persona que está movida por la codicia. Dice la Biblia:
[1 Reyes 13:4, RVR1960] Cuando el rey Jeroboán oyó la Palabra del varón de Dios que había clamado contra el altar de Betel, extendió su mano desde el altar diciendo prendedle, más la mano que había extendido contra él se secó y no la pudo enderezar.
Es decir, que los pecados que nosotros cometemos con nuestras manos pueden abrir la puerta a enfermedades que afecten esas manos que están pecando. Es muy claro. Entonces, la codicia puede ser una de las causas, uno de los pecados que le abra la puerta a una enfermedad como la artritis que va afectando las manos, dejándolas inoperantes de a poco, inmóviles, endurecidas, porque una persona que se va manejando sin tratar un problema de codicia o de avaricia, el corazón de esta persona se va endureciendo como una roca y entonces la dureza de ese corazón se va reflejando en las manos.
¿Por qué? Porque como ya he dicho varias veces, cuerpo, alma y espíritu están conectados, se relacionan entre sí. No somos tres seres distintos, somos un solo ser, una sola persona, pero que está compuesta de tres partes, si lo podríamos decir así, cuerpo, alma y espíritu. Como dice la Palabra que cuando venga el Señor, Él quiere encontrarnos irreprensibles en cuerpo, alma y espíritu.
Y no solamente el espíritu es importante, las tres cosas son importantes, porque las tres cosas son creadas por el Señor y porque las tres componen una misma cosa. Y uno de los errores que comete muchas veces la Iglesia, es solamente ponerle el enfoque al espíritu y no darle importancia al cuerpo, o poner el enfoque en lo espiritual y no darle importancia al alma. Las personas que están en el mundo cometen el error, no siempre, pero muchas veces, de darle mucha importancia al cuerpo, pero no al espíritu. Inclusive a veces al cuerpo y al alma, pero no al espíritu. Cuando en realidad somos una sola persona, un solo ser, compuestos de tres partes, por decirlo de alguna manera. Dice la Palabra:
[1 Tesalonicenses 5:23, RVR1960] Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
Lo que le sucede al alma repercute en el cuerpo y en el espíritu, lo que le sucede al cuerpo repercute al alma y al espíritu, y lo que le sucede al espíritu repercute en el alma y en el cuerpo, porque son tres hilos que forman un solo cordón, y si uno de esos tres hilos está flojo, los otros dos se ven afectados, se van gastando, resisten menos, porque no es la misma fuerza de dos cordones sanos y uno débil que de los tres hilos sanos.
Entonces, la Iglesia tiene que aprender a pensar de una manera completa. La Iglesia tiene que aprender a ampliar la manera de pensar a la manera celestial. La Iglesia tiene que dejar que el Señor rompa esas estructuras que ahora le pone el límite para avanzar. La Iglesia tiene que aprender a pensar en una manera que lo abarque, en una manera más amplia que como piensa ahora. Entonces, cuando un corazón se endurece, me dice el Señor, esto se ve reflejado en el cuerpo. Un espíritu de frialdad, porque hay distintos tipos de espíritus, por si algunos de ustedes no sabían, pero hay espíritus dentro del reino de las tinieblas.
Hay distintos tipos de espíritus, distintos tipos de potestades, distintos trabajadores en ese reino de las tinieblas.
[Efesios 6:12, RVR1960] No tenemos lucha contra carne ni sangre, contra sangre ni carne, y carne, perdón, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad, ¿en dónde? En las regiones celestes.
En el reino de las tinieblas hay distintos personajes, distintos trabajadores que se ocupan de cosas distintas. Cada cual tiene su trabajo, su tarea. Y tenemos que entender que así como en el Reino de los Cielos hay distintos puestos de trabajo y cada cual se ocupa de algo muy específico, cada cual se ocupa de un área de ese Reino, tiene distintas tareas, tiene distinto nivel de poder y distintos niveles de autoridades, lo mismo sucede con el reino de las tinieblas. Porque para que un reino funcione tiene que haber una organización, porque Dios es un Dios de orden y todo está ordenado en el Reino de los Cielos. Hasta el enemigo sabe que si no hubiera un orden en autoridades, en poderes, en tareas específicas, en roles, en su reino, no podría llevar adelante los planes que él tiene que ejecutar en contra de la humanidad.
Entendiendo esto, tenemos que saber y tener en cuenta que hay distintos espíritus del reino de las tinieblas, como dice Efesios 6, que se ocupan de distintas cosas y dentro de esta amplia gama de espíritus de las tinieblas que hay un sector, hay algunos, hay un grupo de estos trabajadores que se especializan en el robo, hay otro grupo que se ocupan de enfriar los corazones de las personas, son espíritus de crueldad.
Hay otro grupo de trabajadores del reino de las tinieblas que se especializan, por ejemplo, en la envidia. Y cuando estos espíritus trabajan adentro o afuera de una persona, porque estos tipos de espíritus pueden inspirar a la persona por dentro o lo pueden hacer por fuera, ese es otro tema, porque las cosas espirituales son muy profundas y hay muchos misterios que nosotros ni siquiera sabemos cómo deberíamos saberlos, pero me voy a enfocar en el punto que el Señor quiere que hable.
Cuando hay en el corazón de una persona un espíritu de crueldad, este corazón de la persona se va enfriando espiritualmente hablando y si uno pudiera ver el núcleo del alma de esa persona que representa el corazón, ese núcleo se va enfriando, se va volviendo como un cubo de hielo en lo espiritual para los videntes como yo del Reino de los Cielos, por supuesto, porque si leemos la Biblia encontramos que Samuel era vidente, que Gad era vidente y así hay distintos profetas que son mencionados como videntes en la Biblia, levantados por el Señor y cuya característica es que la mayor parte de la revelación que reciben es a través de ver espiritualmente hablando. Porque hay distintos tipos de profetas también, pero ese es otro tema, la gloria es para Dios.
Ahora, una persona que es vidente o una persona que tal vez no es un profeta vidente, pero que tiene discernimiento de espíritus, por ejemplo, a veces puede ver, puede tener una visión del corazón de una persona y ver que ese corazón está helado, frío, convertido en hielo, lo puede ver de color azul en esta visión y no encendido en fuego, no de color rojizo que representa un corazón blandito, un corazón de carne como le dice la Biblia.
Este espíritu de crueldad tiene la misión de ir enfriando el corazón de la persona y esto que se refleja, que sucede en el corazón de la persona a nivel espiritual, se va reflejando en el cuerpo y esto de hecho hasta se puede empezar a observar en el rostro de una persona, se puede discernir esa crueldad que está conectada con la frialdad en el semblante de la persona, en la piel, en la estructura del cuerpo, uno puede discernir si tiene sus sentidos medianamente desarrollados que es una persona fría. Y esta frialdad del corazón que si uno no lo trata y sigue pecando a través de esa frialdad, a través de esa crueldad, abre la puerta para provocar enfermedades. Dice la Biblia:
[Proverbios 12:10, RVR1960] El justo tiene consideración de la vida de su bestia, mas el corazón de los impíos es cruel.
Entonces, cuando un corazón se va endureciendo por causa del pecado, normalmente, este endurecimiento, esta frialdad se puede reflejar en distintas partes del cuerpo, las cuales la persona utiliza para llevar, para ejecutar ese pecado que como dice la Biblia, nace en el corazón. Entonces, si una persona, por ejemplo, utiliza sus manos para pegarle a sus hijos, porque ese es el ejemplo que me está viniendo ahora, por el Espíritu Santo de Dios, yo estoy viendo a alguien que utiliza sus manos para castigar a sus hijos, para pegarleS, ya sea porque los hijos han hecho algo mal o porque simplemente la persona fue educada así y entonces repite estos patrones de pegarle a los hijos, es decir, por distintas causas, el hecho es que estoy viendo a una persona que utiliza sus manos para pegarle a sus hijos de manera física, estamos hablando.
Bien sea para disciplinar a los hijos porque a veces lo llaman de esta manera o llámese para maltratarlo, porque a veces lo llaman de la otra manera. En cualquiera de las dos ocasiones, estas manos están siendo utilizadas para ejercer violencia física contra sus hijos. Y en este caso, esta persona está pecando con sus manos, violentando a sus hijos, aplicando una forma de disciplina física que no está acorde a las Escrituras del Nuevo Testamento con las enseñanzas del Señor Jesús. Entonces, cualquiera sea la causa por la cual esta persona utiliza sus manos para pegarle a sus hijos, para ejercer violencia física contra ellos, ya sea en el nombre de la disciplina o del maltrato, la persona está pecando. Y este pecado puede abrirle la puerta para que la persona tenga enfermedades en sus manos, distintos tipos de enfermedades, pero un tipo de esas enfermedades es en los huesos.
La gloria sea para el Señor por lo que Él está revelando en este momento. Y este tipo de pecado que yo acabo de nombrar recién, va endureciendo el corazón del padre y del hijo. Y esta dureza que se va desarrollando en el corazón del que ejerce la violencia, al igual que en el corazón del que la recibe, se va a empezar a reflejar en distintas áreas de la vida de la persona, incluyendo en su cuerpo. Si no se arrepiente, y esto no es tratado. La gloria sea para el Señor.
Ahora, lo que va a hacer el Espíritu y lo que está haciendo durante esta ministración es dar distintos ejemplos que causan enfermedades de los huesos en distintas áreas del cuerpo para que ustedes lo lleven en oración. Y quizás tengan que arrepentirse sobre estas cosas si es que orando encuentran que este pecado estaba en sus vidas y obviamente ustedes no se daban cuenta para poder ser perdonados, limpiados, sanados y liberados de estas cosas, y para estar sin mancha delante de la presencia del Señor, que es nuestro objetivo más importante y el principal.
Wow, qué testimonio el de esta hermana que ha compartido: mi esposo castiga a mis hijos con sus manos y tiene artritis. Ustedes observen, me dice ahora el Espíritu, ustedes observen lo que yo voy a ir diciendo durante este vivo. Ustedes ténganlo en cuenta y después obsérvenlo en su vida normal. Cuando ustedes conozcan a una persona que es notable, que es codiciosa o que tiene avaricia, porque normalmente las dos cosas actúan en conjunto, la codicia con la avaricia, porque el que quiere más, el que quiere siempre más, también no quiere gastarlo, porque si no, ya no tiene más de lo que quería.
Entonces los distintos espíritus demoníacos trabajan en grupo contra una misma persona para lograr sus objetivos, para que la persona siempre esté como en un círculo vicioso de donde no pueda salir si fuera posible, aunque sabemos que el Señor sí la puede sacar de ahí, si se humilla y se arrepiente y le pide ayuda, gloria a Dios, porque esa es nuestra esperanza, y para llevarlo a niveles mayores de pecado sin que se dé cuenta.
Entonces, si ustedes observan a alguien que es codicioso, que tiene avaricia, pongan atención y se van a dar cuenta que en algunos casos las manos de estas personas se van deformando, ya sea por la artritis o por otro tipo de enfermedades en las manos, pero si ustedes conocen a una persona, por ejemplo, que es fría, dura en el corazón, notable, cruel o que le cuesta sentir algo cuando alguien está sufriendo, que le es fácil ver sufrir a alguien y no le afecta, este tipo de cosas.
Ustedes observen el semblante de esa persona, el cuerpo, las características en su cuerpo, lo que se ve de esta persona y van a empezar a reconocer estas señales que les estoy diciendo y van a entender, van a empezar a discernir lo que se mueve en ella a través de observarla, digamos, en cómo ella luce, cómo habla, cómo se mueve, cómo se dirige hacia los demás, etcétera. Porque vuelvo a repetir, el alma, el cuerpo y el espíritu están interconectados, se relacionan entre sí y lo que hay en el corazón, se muestra en el cuerpo, lo que hay en el corazón afecta al espíritu y viceversa. Entonces, ustedes pueden ver, si aprenden a desarrollar estos sentidos, como dice la Biblia, que lo que hay en el corazón de una persona, muchas veces, a través de aprender a discernir el cuerpo de la persona por el Espíritu de Dios. Y como el engaño en este tiempo está creciendo en gran manera, como el error, la apostasía y el poder falso, o mejor dicho, el poder del diablo se va a manifestar en un nivel mayor, cada vez mayor en estos últimos días, así como el poder de Dios se está viendo, pero se va a ver en unos niveles muchísimo mayores que ahora. Gloria a Dios por eso. Como las dos cosas van a estar operando juntas en la Tierra, mientras la Iglesia del Señor Jesucristo sigue acá, lo que el Señor quiere a través de estas enseñanzas proféticas, es que ustedes estén despiertos y aprendan a discernir, inclusive en los detalles que hoy estamos discutiendo y poniendo sobre la mesa, porque cada uno de estos puntos se va a volver crucial para no caer en estos engaños. Amén. La gloria sea para el Señor.
Aquí van compartiendo los hermanos en el chat, algunos testimonios de lo que el Señor estaba hablando. wow. Bueno, cuando vean después esta palabra, lean los testimonios que vamos colocando en la pantalla, que vamos sacando del chat de lo que ustedes comentan, porque enriquece y confirma lo que el Señor estaba hablando. Entonces, dicho esto, otra de las razones que puede generar enfermedades en los huesos, es la tristeza. Es muy regular que la tristeza se aloje en los huesos. Y, como dije unos minutos antes, otro grupo de estos trabajadores de las tinieblas se dedica en hacer triste a la gente, en deprimir a las personas, si les fuera posible. Hay demonios que tienen trabajos específicos y hay un grupo de estos espíritus de las tinieblas cuyo trabajo especial es la tristeza y la depresión. Y cuando estos espíritus tienen el derecho de operar en una persona es muy regular que se alojen en los huesos. De hecho, hay un pasaje en la Biblia que habla sobre eso:
[Proverbios 17:22, RVR1960] El corazón alegre constituye buen remedio, más el espíritu triste seca los huesos.
Una persona, y no solamente los inconversos; estamos hablando de los hijos de Dios, que está influenciada por un espíritu de tristeza o de depresión y no trata con eso y no se arrepiente de darle lugar. Es muy factible que a la corta o a la larga este espíritu gane el derecho de colocar una enfermedad en su cuerpo. Y esto puede darse en distintas partes del cuerpo y demás, pero como el tema de hoy son los huesos, una de las posibilidades donde esa enfermedad sea colocada es en los huesos.
Huesos, articulaciones, musculatura, normalmente son muy afectadas por una persona que vive triste, cuyo espíritu está triste, como dice Proverbios 17:22. Por una persona que vive deprimida, muchas veces este tipo de personas que viven tristes o en depresión y no lo tratan, incluyendo hijos de Dios, estoy hablando. Sus huesos, sus articulaciones empiezan a enfermarse, sus músculos empiezan a debilitarse porque la tristeza debilita al cuerpo y muy regularmente al sistema locomotor. Otra enfermedad que es muy regular, que esta conectada con esto y que vuelvo a repetir, quizás no siempre es la causa, pero suele serlo, es la fibromialgia.
Y sobre los huesos, yo estoy viendo ahora que cuando un espíritu de tristeza está alojado en el esqueleto de una persona, empieza a roer esos huesos. Y me vienen imágenes de mujeres grandes, que se manejan en una actitud de víctimas. El victimismo enferma al sistema locomotor, me dice el Señor. Porque el victimismo es un autoataque. Primeramente a nivel espiritual, pero que afecta a nivel corporal a la larga.
Entonces ustedes van a ver que las personas que están acostumbradas a manejarse bajo una actitud de víctimas, regularmente estamos hablando y constantemente, y esto también se conecta con la desvalorización, con la autodesvalorización, con desvalorizarse a sí mismo, con no amarse, con castigarse a sí mismo. Todas estas cosas son como dagas que se clavan contra uno mismo, afectando no solamente el alma y el espíritu, sino también el cuerpo. Si no son tratadas. Entonces, la artrosis y la osteoporosis que va gastando los huesos, muchas veces, aunque no siempre, puede estar causada por un espíritu de tristeza que se aloja en el esqueleto y que va royendo los huesos de esa persona a nivel espiritual. Y esto se refleja a nivel corporal. No todo tiene que ver con la edad o con el desgaste físico normal de un cuerpo, lo cual también es válido. Pero nosotros podemos tener dos personas de 70 años, una tiene osteoporosis y la otra no. ¿Por qué?, si las dos tienen la misma edad. Es decir, hay distintas cosas que hay que tener en cuenta en las enfermedades, vuelvo a repetir, no podemos encasillar todo en una sola regla.
Pero el Espíritu Santo está hablando sobre algunos ejemplos que están activos en los que están escuchando este video ahora. Para que se arrepientan de lo que el Señor está hablando, si encuentran que es así en sus vidas, pidan perdón, pidan sanidad y en algunos casos liberación y empiecen a resistir al diablo en esas áreas de sus vidas, a obedecer al Señor, a defenderse de estas cosas para que no solamente se pongan a cuentas con Dios, sino que sus vidas espirituales y físicas avancen y mejoren. Porque el Señor quiere que sus hijos vivan bien, que tengan una buena calidad de vida en ese sentido, que tengan salud y que no estén enfermos. Y por eso el Señor revela estas cosas. Entonces, la tristeza, la depresión, y estoy hablando de tristeza que no es lícita, estas cosas son muy espirituales, son muy profundas y no es fácil hablar en una hora y pico sobre esto, pero me voy a sujetar a lo que creo que el Espíritu quiere transmitirles a ustedes.
Hay una tristeza lícita y una tristeza ilícita. Hay una tristeza, por ejemplo, que una persona puede pasar por la muerte de alguien querido, ese luto, esa tristeza por cierto tiempo, si esa persona se mueve en los tiempos que el Señor le da para cumplir con ese luto, no hay pecado en esa tristeza. Jesús lloró cuando Lázaro murió, ¿verdad? Dice la Biblia, Él lloró. Es decir, es lícito estar triste por ciertas cosas, pero hay otras ocasiones en donde la tristeza simplemente es pecado. No es una tristeza justificada, no es una tristeza por arrepentimiento, es una tristeza mundana, es una tristeza cultural, es una tristeza que no tiene justificación delante de los ojos de Dios. Y nosotros no nos manejamos como se maneja lo normal del mundo, sino como se maneja el Señor. Y nosotros, nuestro manual es la Biblia, y no lo que dicen las personas que tienen ciencia pero del mundo.
Entonces, estamos hablando de una tristeza ilícita, de una tristeza cuando es pecado. Porque las emociones de los hombres, en realidad, son necesarias y el Señor las creó así. De hecho, Él tiene emociones. El Señor llora, Él se enoja, Él se alegra. Pero estamos hablando de las emociones que son pecado. Son dos cosas distintas. Y si quieren entender más sobre esto, miren el video en este canal cuando el Señor habló sobre las emociones, que si no mal recuerdo el título se los comparto, pero busquen en el canal Noelia ama a Jesús; creo que se llama Cómo tener dominio propio sobre las emociones. Busquen las emociones y ahí van a saber más sobre esto.
Pero bueno, lo que decía es que estamos hablando de los pecados, no de la parte ilícita de las emociones. Y una tristeza prolongada, injustificada, una depresión que no tiene una razón válida de ser, no aprobada por el Señor, fácilmente le abre la puerta a espíritus que entran en la persona y empiezan a corromper el alma, el espíritu y el cuerpo, pudiendo desencadenarse en una enfermedad, por ejemplo, de los huesos, aunque puede afectar la tristeza a cualquier parte del cuerpo.
Otro de los pecados que pueden afectar a los huesos, es la envidia. La envidia corrompe el cuerpo, no solamente el alma y el espíritu, la envidia es como un bicho que se va comiendo a los huesos, porque así lo veo. En esta visión, en esta representación que estoy viendo. La envidia carcome a la persona por dentro, hace arder los huesos. Wow, dice Mari Jiménez, testifico a través de estas enseñanzas proféticas, fui sanada de neurosis. Gloria al Señor, le damos toda la gloria y toda la honra a Dios, qué alegría, muchas gracias por tu testimonio. Gloria a Dios.
Estaba diciendo que la envidia es como un fuego. La Palabra dice:
[Proverbios 14:30, RVR1960] El corazón apacible es vida a la carne, más la envidia es carcoma de los huesos.
Proverbios 14:30 avala lo que el Señor me está diciendo ahora, yo veía como si fuera un bicho espiritual que iba mordiendo los huesos, y a su vez la persona envidiosa arde por dentro. Ustedes muchas veces van a ver que cuando la envidia se manifiesta en alguien, la persona se pone roja de la bronca de ver que el otro tiene lo que ella quiere, o lo que él quiere.
Al igual que la timidez, normalmente se muestra en la cara de la persona, en el rostro, porque los espíritus de timidez muchas veces se alojan en el rostro. Y cuando la persona está tímida, ustedes van a ver que el rostro se pone todo rojo como colorado, es porque es una manifestación en la carne, en el cuerpo de lo que sucede a nivel espiritual. Al igual que la ira, muchos sabemos que hay personas que tienen ira y cuando están iracundos la cara se les pone colorada. Bueno, hay muchas cosas. La vergüenza, la vergüenza y timidez están conectadas, pero la vergüenza era lo que más quería decir y colorea el rostro.
Bueno, hay muchas cosas, no nos vayamos por las ramas, pero es lo que me va viendo. Ahora, decía que la envidia es como un fuego que va quemando a la persona, de hecho lo estoy viendo ahora, una persona que se maneja por la envidia, puede ser consciente o inconscientemente, normalmente es inconsciente, son pecados, que a la gente le cuesta mucho reconocer, pero eso no quiere decir que no estén ahí igual, inclusive dentro de la Iglesia, y en realidad en gran cantidad dentro de la Iglesia lamentablemente. La Biblia dice:
[Proverbios 27:4, RVR1960] Cruel es el furor e impetuosa la ira, más ¿quién resistirá ante la envidia?.
La envidia es un pecado tremendamente dañino, pero no más que nada para el que la persona envidiosa está envidiando, sino para el mismo envidioso porque la envidia lo va carcomiendo por dentro y lo va quemando por dentro, y estaba diciendo que veía una persona que cuando siente envidia se prende un fuego adentro de ella, pero no es un fuego bueno, no es el fuego del Espíritu Santo, no es el fuego que representa también un celo por las cosas de Dios, por ejemplo, es un fuego que consume a esa persona, y la envidia entonces puede ser uno de los pecados que afecta al esqueleto. Por lo cual muchas personas, muchos hijos de Dios pueden estar teniendo problemas óseos porque son envidiosos y no se arrepienten y no lo tratan, y no ponen este pecado sobre la mesa. La gloria sea para Dios.
Yo estoy sabiendo ahora, otra de las razones de las enfermedades en los huesos es, no porque la persona está pecando en alguna de estas cosas, sino porque su generación pasada pecó en algunas de estas cosas o en otras que yo ahora no estoy nombrando, y esto abrió la puerta para una maldición generacional de enfermedades óseas. Por ejemplo, la abuela tuvo reuma, artritis, o tuvo osteoporosis vamos a decir. La hija tiene osteoporosis, la nieta tiene osteoporosis y se va repitiendo de generación en generación.
Cuando una enfermedad se va repitiendo anormalmente de generación en generación, lo más probable es que haya una maldición generacional de esa enfermedad. Porque no es lo mismo que una persona dentro del árbol familiar aisladamente tenga cierta enfermedad, que esa enfermedad se venga repitiendo desde arriba hacia abajo de manera regular. La diabetes es un ejemplo. Normalmente, cuando ustedes ven que el abuelo tenía diabetes, el hijo tuvo diabetes, el nieto tiene diabetes, es por un motivo generacional. Dice la Palabra:
[Números 14:18, RVR1960] Jehová es largo en ira y grande en misericordia, que perdona la iniquidad y la rebelión, aunque de ningún modo tendrá por inocente al culpable, que visita la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y la cuarta generación.
Algunos de ustedes están enfermos de los huesos, no porque pecaron ustedes, sino sus antepasados. Y cuando una persona tiene una maldición generacional de enfermedades, como en este caso, quizás la persona no peca con ese mismo pecado, pero sí va a tener una debilidad para con ese pecado que provocó esa maldición generacional.
El Señor me está trayendo este ejemplo ahora, puede haber una persona que no está robando, sin embargo, su abuelo robaba, y robar no solamente puede ser robar como normalmente el mundo lo conoce, hay muchas maneras de robar y no todas están aceptadas como robo, pero eso no quiere decir que no siga siendo robo. Si un abuelo tenía una empresa, y no le pagaba lo que le correspondía a sus trabajadores, esta es una forma de robar ante los ojos de Dios, porque le está robando parte del salario que esos trabajadores se merecen.
Entonces, quizás el abuelo era cristiano, quizás era hijo de Dios, pero le pagaba menos de lo que tenía que pagarle a sus empleados en su negocio, y ante los ojos de Dios él tenía manos que roban. Por lo tanto, este pecado puede abrir la puerta para que entre un demonio y provocar una enfermedad en sus manos por causa de una maldición por haber robado en esta manera. Esta maldición afecta a la línea generacional hacia el futuro, si no es cortada, pudiendo provocar que se repita la misma enfermedad que se dio en ese abuelo, que ante los ojos de Dios tenía sus manos manchadas por robar parte del salario a sus empleados.
Entonces, el hijo tiene la misma maldición activa, se da la misma enfermedad, al nieto le pasa lo mismo, y quizás, por dar un ejemplo, el nieto no roba, pero sí, estando esta maldición activa, normalmente suele tener una tendencia, como una debilidad, a estar tentado a robar en cualquier manera. Y vuelvo a repetir, no siempre robar es robar algo tan, digamos claramente, como robar un banco, una billetera, robarle algo a alguien que está al lado tuyo, robar algo en una casa, robar un chicle en un kiosco, o sea, hay muchas maneras de robar que están encubiertas.
Entonces, la persona que está bajo una maldición generacional puede que no esté pecando, pero sí tiene que resistirse a esa tentación de la que el diablo se quiere aprovechar constantemente, poniéndole trampas en su vida continuamente para ver si cae en el mismo pecado y poder agravar esa situación en esa línea familiar. La estafa, guardarse cosas de alguien que tenemos que devolver es una manera de robar. Bajar música que no compramos, la cual no estaba permitido bajar, es una forma de robar. O sea, hay muchas formas de robar que ante los ojos de Dios es robo, pero que quizás ante la persona no, sea hijo de Dios o no.
Por eso es tan importante leer cada hoja de lo que dice la Biblia, porque en la Biblia nos enseña bien lo que es robar y lo que no lo es. Pero bueno, eso es una inclinación. Es que la persona que está bajo una maldición generacional tiene una inclinación hacia ese pecado, pero quizás eso no quiere decir que la persona ceda ante ese pecado, sino que tenga una inclinación hacia eso, que sea como una debilidad en él.
Yo estoy viendo ahora, me viene la palabra «cleptómano». Hay personas que son cleptómanas, que tienen como un vicio del robo, como es una adicción, es otro nivel del pecado del robo. Hay espíritus que se dedican exclusivamente a eso, son espíritus de cleptomanía. Y esto se ve en las líneas generacionales regularmente. Son familias de ladrones. Y los que no roban igualmente sienten una tentación a robar, o notan que sus vidas, todo el tiempo se les presentan oportunidades donde robar sería fácil. ¿Por qué? ¿Por qué a estas personas sí y a otras no? Hay una razón. Tener una predisposición.
Otra de las razones que enferma a los huesos, me dice el Señor, es la mala alimentación. La mala alimentación puede enfermar a los huesos. Consumir comida que tiene elementos, es decir, elementos que no nutren, que no son nutrientes, son como elementos cero, no aportan nada al cuerpo, como comidas cargadas de grasas, de azúcares, de metales, de venenos, de sustancias que no favorecen al cuerpo. Hay algunas sustancias que específicamente, si se consumen regularmente, no una vez cada tanto, van corrompiendo los huesos. Y a veces, el Señor me dice, inclusive, que el Espíritu Santo inspira a algunos de ustedes a que consuman ciertas cosas que sus huesos necesitan y no le están haciendo caso al Espíritu Santo.
La falta de ciertas sustancias que le hacen bien a los huesos, provoca enfermedades, simplemente. El estrés es un pecado. Vuelvo a repetir, el estrés es un pecado. Porque el estrés es quebrantar el cuarto mandamiento, que es el descanso, que bajo este nuevo pacto tiene que ser respetado, bajo una ley espiritual, que es la ley de Cristo. Cuando una persona no respeta el cuarto mandamiento que está escrito en su corazón y no descansa, no bajo la ley de Moisés, sino bajo la ley de Cristo, donde nuestra guía es el Espíritu Santo que nos indica cuándo descansar, no solamente a nivel espiritual, sino físico, esta persona está pecando, está quebrantando este mandamiento.
El estrés es un pecado. Y el estrés abre la puerta para que el cuerpo, si fuera posible, se enferme. La falta de descanso, no solo en el espíritu, sino corporalmente hablando, abre la puerta para que el cuerpo se enferme. ¿Por qué? Porque la persona que no descansa lo que tiene que descansar, no solamente está quebrantando el cuarto mandamiento en la manera espiritual, bajo el Espíritu Santo, que también incluye al descanso del cuerpo, sino que está abusando del templo del Espíritu Santo. El estrés es un abuso del templo del Espíritu Santo, porque nuestro cuerpo es un vehículo que el Señor nos ha dado para cumplir nuestro propósito sobre esta Tierra. Y sin embargo, el estrés es un abuso del templo del Espíritu Santo. Y si nosotros abusamos de este vehículo que el Señor nos ha dado para cumplir nuestro propósito en la Tierra, entonces estamos pecando contra ese vehículo que a su vez es el templo del Espíritu Santo. Nuestro cuerpo no es nuestro, dice la Biblia. Nuestro cuerpo es de Él, es del Señor.
Si verdaderamente nos entregamos al Señor en el bautismo, una de las cosas que sucede en el bautismo del agua es que nuestro cuerpo pasa a tener, digamos, el papel de nuestro cuerpo pasa a ser propiedad del Señor Jesucristo. Él lo compró por su sangre, no compró solamente nuestra alma y espíritu, Él compró nuestros cuerpos en esa cruz. Y cuando nosotros creemos en Jesús, nos arrepentimos y nacemos de nuevo. Una de las cosas que pasa en el bautismo del agua es que no solamente nuestra alma y nuestro espíritu, nuestros cuerpos pasan a pertenecerle a Él legalmente hablando. Es literal y el precio de ese cuerpo es su sangre. El pago por ese cuerpo no son dólares, no son pesos argentinos, no es lingotes de oro, es la sangre de Cristo. Pero tenés que entender ahora que tu cuerpo, si verdaderamente te entregaste al Señor ese día, no es tuyo, está prestado. El Señor te da ese cuerpo como vehículo para que te puedas mover en este mundo para cumplir tu propósito divino. Por lo tanto, nuestro cuerpo es como un auto que cuando uno abusa de él, se termina rompiendo, la culpa es del abusador del auto y no del auto.
Por lo tanto, si nosotros no le damos el descanso que nuestro cuerpo necesita, nosotros estamos pecando contra nuestro cuerpo, que a su vez no es nuestro sino de Él, porque estamos administrando mal el cuerpo que Dios nos dio para movernos para Él. Entonces, el estrés es un pecado muy, muy subestimado y, sin embargo, acarrea mucho daño porque muchos de ustedes no están robando, no están adulterando, no están fornicando, no están matando, pero no están descansando. Es decir, de la tabla de los 10 mandamientos que están escritos en sus corazones, quizás están guardando 9 en el espíritu, pero el cuarto, que es el del descanso, lo están quebrantando y no se dan cuenta. Y después le echan la culpa al Señor muchas veces, ¿por qué estoy enfermo, por qué pasa esto?, y es que en realidad, sí hay una puerta abierta y es el quebrantamiento del descanso. No estamos hablando del día sábado. Estamos hablando de aplicar, de respetar el cuarto mandamiento que es el descanso bajo el nuevo pacto en el cual estamos nosotros los que le pertenecemos a Cristo Jesús, y que conformamos su pueblo, su nación santa, su Israel espiritual. Y que ya no estamos bajo la ley de Moisés, sino bajo su ley, porque estamos bautizados bajo su nombre de Cristo Jesús.
Gloria a Dios. Entonces, el estrés acarrea, abre la puerta para todo tipo de enfermedades, que ahora no vamos a nombrar, pero una de las enfermedades que puede provocar el pecado del estrés es enfermedades óseas, porque los huesos también necesitan descansar, porque los huesos conforman el esqueleto y el esqueleto representa lo que nos ayuda a movernos lo cual es igual a un auto que no puede estar 24 horas encendido funcionando. Si nosotros utilizamos un auto y nunca frenamos, nunca le damos tiempos en donde no es usado, nunca le cambiamos los filtros, nunca aceitamos el motor, yo no sé mucho de autos, pero lo básico, si no hay un mantenimiento de ese auto y al auto se le abusa, se lo golpea, se lo usa como si fuera una máquina que nunca se va a romper, el auto mucho no va a durar.
Lo mismo sucede con el cuerpo. Estas cosas tienen sus consecuencias y nuestros cuerpos son como máquinas de carne que necesitan un cierto mantenimiento donde tiene que ser usado el cuerpo en los tiempos del Señor. Y hay un tiempo para todo, dice Esclesiastés, un tiempo para trabajar, un tiempo para descansar, un tiempo para hablar, un tiempo para callar, tiempo de guerra, tiempo de paz, etc. Entonces, el abuso del cuerpo es un pecado que abre la puerta para recibir enfermedades distintas. Simplemente. Otra razón por las cuales los huesos del cuerpo pueden estar enfermos es por causa de brujería. Algunos de ustedes sienten pinchazos en los huesos y en los músculos.
Una de las razones, aunque no siempre es así, repito, puede ser por causa de brujería, que sí ha entrado en sus vidas y que sí les está afectando, y que, por ejemplo, puede ser esa puerta abierta para que esta brujería entre por el estrés que hablábamos o por otro tipo de pecados, por distintas razones. Pero la brujería provoca enfermedades y los huesos pueden estar enfermos por causa de brujería. El vudú es un tipo de brujería que afecta muchísimo todo lo que es el sistema locomotor. Los músculos, las articulaciones y los huesos. Más los músculos, claro, porque son como la parte más sensitiva del sistema locomotor, donde se siente la mayor parte del dolor, ¿no? Digamos, es más fácil sentir dolor de músculos que de huesos, creo yo.
No sé si me explico, pero el vudú es un tipo de brujería que suele afectar muchísimo al sistema locomotor en todas sus partes y no solo los músculos. El cansancio de la vida es otro pecado que puede desgastar los huesos, me dice el Señor. Ustedes pueden leer en el libro de los Salmos, me parece, que varias veces, si no me equivoco, David dice como que de tanto sufrir, los huesos iban siendo afectados y este tipo de cosas. A ver si podemos encontrar alguno de estos versículos.
[Salmos 31:9-10, RVR1960] Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy en angustia;se han consumido de tristeza mis ojos, mi alma y mi cuerpo. Porque mi vida se va gastando de dolor y mis años de suspirar; se han agotado mis fuerzas a causa de mi iniquidad, y mis huesos se han consumido.
[Salmos 38:3, RVR1960] Nada hay sano en mi cuerpo a causa de tu ira. Ni hay salud en mis huesos a causa de mi pecado. Porque mis iniquidades se han agravado sobre mi cabeza como carga pesada se han agravado sobre mí.
Tremendo versículo que resume mucho de lo que estamos diciendo. No hay parte sana en mi cuerpo a causa de tu ira. Ni salud en mis huesos a causa de mi pecado. Porque mis iniquidades se han agravado sobre tu cabeza. Sobre mi cabeza como carga pesada se han agravado sobre mí. Y me atrevo a decir, porque el Espíritu Santo me lo ha revelado desde hace tiempo, que la mayor parte de la causa de las enfermedades que los hijos de Dios tenemos es por el pecado. Aunque no siempre, como también dije al principio. Pero bueno, estábamos diciendo, el cansancio de la vida es un pecado.
El querer morirse es un pecado porque es atentar contra la vida que Dios te regaló. Y cuando vos te querés morir, cuando vos decís que estás cansado de la vida, que ya querés irte, en una manera diabólica, estás pecando contra el Señor porque la vida viene de Él. Porque Él es el que te hace hoy que estés vivo. Porque Él te da la respiración para que hoy sigas parado sobre tus pies.
El cansancio de la vida es un pecado que, me dice ahora el Espíritu Santo muchas veces, afecta a los huesos, desgastándolos, debilitándolos o provocando enfermedades en ellos. Y hay distintos pecados, también me dice el Señor, distintos tipos de pecados que provocan debilidad en el alma. Y esa debilidad va impactando al cuerpo, específicamente en los huesos, que se van debilitando y la persona entonces se vuelve más propensa a quebrárselos.
¿Vieron que hay ciertas personas que son propensas a quebrarse los huesos? Muchas veces esto es, aunque no siempre, acuérdense, porque hay puertas abiertas en su vida por cualquier tipo de pecado que provoque debilidad en la persona. Personas débiles que no se dejan fortalecer por el Señor, esta debilidad que permiten en sus vidas se puede manifestar en una debilidad ósea y entonces después la persona se quiebra fácilmente los huesos. Dice Salmos 32:3, mientras callé, envejeciéronse mis huesos en mi gemir todo el día.
Busquen en la Biblia todo lo que habla sobre los huesos y se van a maravillar. Hijitos, dice el Señor, hay muchos misterios del cuerpo que ustedes no conocen, porque yo Noelia estoy sabiendo que ahora algunos, no todos, pero algunos de ustedes están cuestionando lo que yo dije hoy y se están preguntando en sus corazones, ¿será realmente así?, como ella dice, yo no creo que sea así, no creo que funcione así. Y el Señor responde para esas personas y para todos los que están escuchando que hay misterios que el Señor está revelando a través, por ejemplo, de este ministerio que solamente son aptos de comer y de digerir por los que están maduros espiritualmente hablando, por los que pidieron por estos misterios para que sean revelados.
Y es más, yo estoy sabiendo que muchos de ustedes oraron por esto y le dijeron al Señor, Señor, háblanos a través de tu sierva Noelia sobre los huesos y esto es una respuesta para ustedes. Yo veo dos palabras, una que dice «debilidad», después veo un signo igual y veo la palabra «huesos», cuando una persona se siente débil anímicamente hablando, los huesos son impactados por esta emoción, porque vuelvo a repetir, lo que pasa en el alma impacta en el cuerpo, no son tres cosas distintas, sino es una misma cosa, un mismo ser que se conforma de tres sustancias distintas, porque así lo escucho, tres sustancias distintas, pero no están separadas, sino que la una impacta a la otra y viceversa.
Hijitos, ustedes no son entendidos de todas las cosas espirituales, algunos de ustedes son entendidos de algunas de ellas y otros de otras, pero no hay ninguno en esta congregación que entienda absolutamente todo sobre estos misterios que estoy revelando a mi pueblo. Sean humildes dice el Señor y lo que hoy no lo entiendan, escudriñenlo en la Biblia, hablen conmigo sobre esas cosas para ver si son así como se las están predicando ahora, pero si ustedes, yo estoy viendo algunos que tiran estas revelaciones a la basura directamente y cierran la puerta a lo que yo Noelia estoy diciendo, dicen: «no, estas cosas son basura» y tiran estas palabras a la basura y me cierran la puerta, es decir no me quieren escuchar más.
El Señor dice cada cual tome su decisión sobre si van a escuchar o dejar de escuchar, creer o dejar de creer, entender o seguir sin entendimiento, más yo seguiré hablando dice el Espíritu de Dios a aquellos que tengan un oído para recibir lo que les quiero revelar porque estoy repartiendo piedras preciosas de conocimiento, sabiduría, instrucción y es posible que lo que hoy algunos de ustedes no lo hayan entendido durante esta palabra lo puedan entender más tarde. Si me buscan, dice el Señor, porque quiero hacerlos entendidos de todas las cosas, no solamente de las que se pueden ver sino también de las que son invisibles y hay cosas que impactan a lo visible a este cuerpo de carne y huesos de las cuales ustedes no estaban conscientes hasta hoy.
Más sin embargo yo estoy trayendo luz y revelación sobre un pueblo que sale de Egipto para que sea elevado en el entendimiento de las cosas espirituales para su bien, para su favor y para que instruyan a otros con estas verdades. Ustedes hoy están en el desierto dice el Señor, que representa esta vida que es como una transición para que después vivamos para siempre con el Señor en la vida eterna en la nueva Jerusalén, es una temporada nada más esta vida. Y el Señor dice mientras están en esa temporada yo les estoy dando maná que viene directamente del cielo para que alimentándose de ese maná ustedes puedan creer que soy Yo el que se los da y al comer al ingerirlo puedan ser sanados de cosas que hoy los agobian, los oprimen, los enferman, los frenan.
Y yo Noelia estoy sabiendo ahora que hay algunos que están escuchando esta palabra que están sintiendo envidia contra mí en este momento por causa de las revelaciones que yo recibo que el Señor me da y el Señor dice no permitan que la envidia crezca en sus corazones porque el demonio de envidia tiene mucha fuerza y es capaz de devorarlos rápidamente dice el Señor como cuando una llamarada de fuego devora a un lugar casi de manera instantánea. La envidia es muy traicionera dejen de envidiarse los unos a los otros dice el Señor porque la envidia está trayendo muchísima enfermedad y muerte a mi pueblo no sólo espiritual sino física.
Hijitos, arrepiéntanse de todas estas cosas que hoy han sido colocadas sobre la mesa dice el Señor erradíquenla de sus vidas denle carta de divorcio a todos estos pecados que han sido nombrados y a los pecados que el Espíritu Santo les va a traer después en su oración personal sobre las posibles causas de por qué están enfermos de los huesos algunos de ustedes. Y yo Noelia hablo ahora a tus huesos en el nombre de Jesús. Dice la Palabra:
[Ezequiel 37:5, RVR1960] Así ha dicho Jehová el Señor, a estos huesos he aquí yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis.
Padre ahora yo te pido que el Espíritu Santo se encienda como llama en el esqueleto de estos hermanos en el nombre de Jesús para que sus huesos cobren vida para que sus huesos sanen te pido Señor que corra el Espíritu Santo de Dios como aceite sanador por adentro y por afuera de sus huesos quemando toda enfermedad, todo virus, toda bacteria.
Porque estoy viendo que esas cosas también enferman a los huesos, cerramos la puerta ahora a todo bicho que esté enfermando a los huesos, Padre te pedimos perdón ahora en el nombre de nuestra línea familiar de nuestras generaciones por todo pecado que haya sido cometido Señor en contra de tus Leyes Espirituales, de tu Palabra Señor, de tu persona, de tu Reino y que haya provocado maldiciones generacionales de enfermedades óseas.
Perdona, Señor, a nuestra genealogía en el nombre de Jesús, te pedimos ahora que cortes toda maldición sobre nosotros, que provoque toda enfermedad que los hermanos están nombrando ahora, toda enfermedad que afecta a los huesos en el nombre poderoso de Cristo Jesús. Yo estoy viendo ahora columnas torcidas, encorvadas y esto muchas veces también es causado por un demonio de enfermedad, porque hay demonios que provocan distorsión de los huesos, Padre te pido liberación para estas personas en el nombre de Jesús.
Padre, pedimos perdón por todo pecado cometido con nuestras manos, que no estábamos conscientes hasta hoy, que abren la puerta para enfermedades óseas en nuestras manos para deformidad, para problemas distintos en nuestras manos Señor. Yo desato las manos en el nombre de Jesús, desato las manos para que sean sanas, ahora corto toda brujería sobre el sistema locomotor de todo aquel que escucha, ahora o después, en el nombre de Jesús, bendigo tus huesos bendigo tu esqueleto.
Señor hay sustancias que necesitan ciertos esqueletos que me estás mostrando, para poder crecer y otros para poder estar fuertes y desarrollar lo que hay que desarrollar la función que tienen los huesos Señor, te pido ahora que hables al cuerpo de estas personas que tienen este problema para que el cuerpo aprenda a producir esa sustancia que necesitan estos huesos en el nombre de Jesús.
Dice el Señor que no se maltraten a ustedes mismos hablando contra ustedes mismos maldiciéndose a ustedes mismos, odiándose a ustedes mismos porque esto provoca enfermedades del sistema inmunológico, que tienen que ver o que afectan al esqueleto, al sistema oseo porque el que se auto castiga peca también contra sí mismo y el sistema inmunológico reacciona en contra del mismo cuerpo de esa persona porque el alma, el espíritu y el cuerpo, están conectados.
Arrepiéntanse de odiarse, de auto castigarse, de tratarse mal a ustedes mismos de rechazarse a ustedes mismos, pidan al Señor perdón para ser sanados, porque dice proverbios 19:8, El que adquiere cordura ama su alma. Porque ustedes están clavando dagas contra ustedes mismos dice el Señor, cuando se auto atacan y el sistema inmunológico recibe la orden de auto atacar al cuerpo cuando ustedes usan sus pensamientos o sus palabras para realizar estos auto ataques.
Arrepiéntanse dice el Señor del ocultismo. El pecado del ocultismo abre puerta para recibir enfermedades o problemas en los huesos, el reiki por ejemplo es un pecado de ocultismo que abre la puerta, para que entren esos espíritus de reiki para que se transfieran desde las manos de la persona que lo practica, al que recibe esa práctica y estos espíritus que han sido transferidos a través de la práctica del reiki, pueden ingresar directamente en los huesos comenzando a provocar degeneración de los huesos progresiva, me dice el Señor.
Arrepiéntanse de todo tipo de terapias en las que ustedes han incursionado sin haberle preguntado al Espíritu Santo, inclusive algunos de ustedes fueron igual sabiendo lo que dice la Biblia sobre algunas de estas cosas, hay terapias que no son lícitas, me dice el Señor, no lo son y en donde se mueven espíritus que después una vez transferidos o ingresados en las personas por más que sean hijos de Dios una de las cosas que pueden hacer es provocar enfermedades.
No dejen que les impongan las manos a la ligera, menos si es una persona que trabaja con terapias alternativas, escuchó terapias alternativas abre puertas, abren puertas, las que son ocultismo a que se transfieran espíritus que después provoquen enfermedades. Ocultismo, brujería, tengan cuidado dice el Señor, guarden sus cuerpos porque quizás no están pecando de otra manera pero cuando ustedes brindan a sus cuerpos para que les practiquen ciertas terapias que son ilícitas espiritualmente hablando, capaz ahí abrieron la puerta para que entre un espíritu de enfermedad de los huesos.
Arrepiéntanse de estas cosas de la ignorancia porque la mayoría de estas cosas están hechas bajo ignorancia no son a propósito claro, pero igualmente son pecado; arrepiéntanse pidan perdón y pídanle al Señor que los libere y que los sane, amén, que los limpie de estas cosas. Estas cosas ensucian a los hijos de Dios espiritualmente hablando y hay gente que practica pilates lo cual no es lícito porque es una práctica en donde se mueven espíritus, los cuales se mueven mucho en en países del lado oriental de la Tierra, espíritus de religiones distintas se mueven en la práctica del pilates.
Me dice el Señor: pilates, yoga, reiki, el magnetismo, hay un montón de estas prácticas, cristales, péndulos, inciensos, hay muchísimas muchísimas de estas cosas, pero más que nada estoy viendo me está diciendo me está revelando ahora el Espíritu Santo que, en las congregaciones se les está abriendo la puerta al yoga y al pilates; acupuntura, artes marciales. Pero yo no sabía, estoy sabiendo, me dice el Señor que en muchas iglesias se le está abriendo la puerta al yoga y al pilates es más lo practican adentro de la Iglesia en la congregación y están metiendo al enemigo en la casa; dígitopuntura, acupresión, imanes, tai chi.
Bueno hay muchísimas, yo no no conozco toda la lista pero específicamente lo que más me habla el Señor ahora es yoga y pilates, porque lo está introduciendo el diablo en las congregaciones como prácticas inocentes, que solamente son una forma de actividad física, cuando realmente las personas que enseñan estas prácticas consigo traen un séquito de espíritus de las tinieblas, que van trabajando en contra de sus alumnos.
El reiki también que muchos de ustedes creen que es inocente, no lo es, manténgase limpios y no se mezclen con estas cosas y el Señor lo está nombrando no solamente por esto pero en relación a los huesos a las enfermedades de los huesos y a los problemas de los huesos, es una de las maneras en las que estos espíritus que muchas veces son como serpientes los veo, son transferidos a los que practican estas cosas y empiezan a deformar por ejemplo las espaldas las rodillas, las manos y otro tipo. En realidad pueden afectar cualquier parte del cuerpo pero estoy viendo mucho espaldas, rodillas, tobillos, pies y manos, gloria a Dios, gracias Señor gracias Señor, te pido que sanes ahora en el nombre de Jesús toda enfermedad osea Señor. Señor nos arrepentimos de ser ignorantes porque la Biblia dice mi pueblo pereció por falta de conocimiento.
Hijitos, arrepiéntanse me dice el Señor, arrepiéntanse arrepiéntanse de estas cosas y de lo que el Espíritu Santo les está marcando ahora, arrepiéntanse y pidan dice el Señor, que toda maldición por estas prácticas sea cortada y que sean sanados y si hace falta en algunos casos, que reciban liberación sobre esto y oren dice el Señor; intercedan para que los ojos de mucho pueblo que están estas cosas sin saber en lo que se mete o sin creer que están mal, sean abiertos.
Gracias, Señor. Te pido sanidad ahora sobre los huesos, me viene la parte de las Escrituras donde dice que ninguno de los huesos del Señor Jesús fue quebrado, que cuando Él murió en la cruz, todos sus huesos fueron guardados intactos, el Señor guardó el esqueleto de Jesús completo por causa de su dignidad, me dice el Señor, wow que hermoso.
Los huesos son importantes dice el Señor, amen a sus huesos cuídenlos, hablen cosas buenas sobre sus huesos, bendigan a sus huesos, entiendan que los huesos son los que los sostienen a ustedes corporalmente hablando, no menosprecien su esqueleto, yo estoy viendo problemas de rodillas, no doblen sus rodillas al pecado dice el Señor, no doblen sus rodillas ante Mamón, no doblen sus rodillas ante los impíos.
Hijos hay muchas cosas, dice el Señor, repite que ustedes no saben, pero que quiero hacérselas saber ¿están dispuestos a escuchar? pregunta el Señor, abran sus corazones aquellos que quieren entender para ser sabios pero con una sabiduría que viene de lo alto y no de abajo y no terrenal, los estoy liberando ahora, dice el Señor Salmos 34:20, Él guarda todos sus huesos, ni uno de ellos será quebrantado.
Yo estoy viendo personas que son viejas pero tienen unos huesos súper fuertes, yo estoy viendo ahora a un hombre que está avanzado en días, sin embargo tiene un esqueleto fuertísimo, veo sus huesos y los veo fuertes. Y dice el Señor, que una persona digna que una persona recta, pero que guarda su dignidad y que es honroso normalmente no va a tener problemas en los huesos, una persona que es entera en el sentido de la rectitud, su esqueleto se va a mantener entero y cuando él se muera su esqueleto todavía va a estar entero, es decir el esqueleto tiene que ver con la dignidad de la persona, con cuánto digno es de que su esqueleto se mantenga completo, entero no sea afectado.
Jesús el hijo de Dios, Él era digno de que ninguno de sus huesos sea quebrado, gloria a Dios, porque la Biblia dice que al que estaba crucificado al lado de Jesús, le quebraron las piernas para que se muera más rápido, pero a Jesús no se la quebraron y no hay casualidades en las historias bíblicas. Es porque esto para el que sí le quebraron la pierna fue una deshonra quebrarle la pierna, fue una deshonra para esa persona, entonces Dios Padre no permitió que se deshonre al hijo de Dios, quebrándole la pierna y esto es lo que representaba en parte, que a Jesús no se le quebró la pierna en la cruz.
[Juan 19:31-33, RVR1960] Entonces los judíos, por cuanto era la preparación, para que los cuerpos no quedasen en la cruz, en el día de reposo, rogaron a Pilato que se les quebrasen las piernas y fuesen quitados; vinieron pues los soldados y quebraron las piernas al primero y asimismo al otro que había sido crucificado con Él o sea a los dos, más cuando llegaron a Jesús como ya le vieron muerto no le quebraron las pierna.
Pero no fue una casualidad que Jesús primero murió y entonces después los soldados no le quebraron las piernas, por eso, porque Él ya había muerto; Dios decidió la hora, el minuto, el segundo en el cual Él iba a entregar su vida para que sus piernas no sean quebradas. Esto ya estaba dicho en:
[Éxodo 12:46, RVR1960] En una misma casa será comida, no sacaréis carne fuera de la casa ni quebraréis hueso suyo.
Estamos hablando de la Pascua, estamos hablando del pasaje del Éxodo donde el pueblo hebreo antes de salir de Egipto celebraron la Pascua por primera vez, Moisés les dijo cómo lo tenían que hacer por mandato del Señor y una de las cosas que tenían que hacer sobre el cordero es, no quebrarle ni uno de sus huesos a ese cordero que iban a sacrificar para la Pascua, gloria a Dios, que tremendo. Esto representa que ni uno de los huesos del Señor Jesús iba a ser quebrado, porque ese cordero de la Pascua del Viejo Testamento, a la manera en que la celebraban los hebreos bajo el Nuevo Testamento, la Pascua es el cordero que es Jesús, cuyos huesos ninguno de ellos tenía que ser quebrado, ni iba a ser quebrado.
El Espíritu me dice que algunos de ustedes tienen que pedir una palabra de sabiduría, es decir, si están enfermos de los huesos pregúntele a Dios primero cuál es la causa de esa enfermedad, si es que el Señor la quiere revelar, y si el Señor la revela pídanle, si ya se arrepintieron, pídanle al Señor, al Espíritu una palabra de sabiduría para sanar de una enfermedad ósea. No todos ustedes pero algunos, me dice el Espíritu que le pidan una solución santa al Señor para esa enfermedad ósea y el Espíritu Santo se las va a dar, gloria a Dios, gracias Señor, gracias Amado mío, Rey Celestial por esta Palabra, por esta ministración, por toda la revelación.
Señor, gracias por traer luz en esta área, te pido ahora que derrames de tu luz sobre todo esqueleto que está escuchando ahora con fe en el nombre de Jesús, te pido Señor ahora que llenes todo hueso que escucha mi voz con tu luz sanadora, en el nombre de Jesús, restaura Señor, todo hueso cansado, todo hueso afligido o quebrado, sana en el nombre de Jesús, te pido Padre endereza todo hueso torcido. Yo veo espaldas torcidas, escoliosis y otras enfermedades de las columnas, endereza los huesos si los caminos están torcidos Señor, enderezalos en sus vidas para que las columnas también se enderecen Señor, en el nombre de Jesús y hay tantas cosas para hablar.
Gracias Señor por este esta tajada nada más de esta torta Señor, porque aquí no está toda la revelación, dice la Biblia que profetizamos en parte y esto solamente es una es una migaja del conocimiento Señor, que tú tienes para enseñarnos acerca de lo de los huesos y del esqueleto Señor gracias Padre por este conocimiento, gracias Señor, yo quiebro toda brujería contra los huesos de los hermanos ahora en el nombre de Jesús y los bendigo y los santificó.
El Espíritu me indica que algunos de ustedes tienen que ungirse sus cuerpos con aceite apartado para el Señor y bendecido en el nombre de Jesús, para que sus huesos sean sanados. Gloria a Dios, gracias Padre Santo, Amado precioso, Aleluya, te alabamos Señor, gracias Señor por esta ministración profética; la gloria, la honra es para ti Padre.
Yo lo veo a Jesús en el Cielo con el Padre pero con su cuerpo y sus huesos enteros intactos, gloria a Dios porque Él resucitó con su cuerpo y su cuerpo al resucitar fue transformado como nuestros cuerpos van a ser transformados cuando seamos levantados, o los que estén muertos que sean hijos de Dios cuando sean resucitados, van a ser transformados en esa resurrección. Por lo tanto vamos a estar completos, gloria a Dios, o sea nuestros cuerpos van a ser transformados. Dice la Palabra:
[Lucas 24:39, RVR1960] Mirad mis manos y mis pies que Yo mismo soy, palpad y ved porque un espíritu no tiene carne ni huesos, como veis que Yo tengo.
Les dijo Jesús a sus discípulos después de haber resucitado, cuando se presentó a ellos, es decir les mostró a sus discípulos que no sólo estaba vivo en espíritu y alma, sino también su cuerpo había resucitado y estaba vivo y les mostraba ese cuerpo transformado y resucitado. Yo lo veo en esta visión a Jesús y veo su esqueleto adentro de su cuerpo, gloria a Dios que está completo que está intacto que está vivo, tremendamente vivo, porque todo lo que está en el Cielo está como más vivo que lo que está en la Tierra; no sé cómo explicar esto, es decir, la vida en el Cielo es más viva que acá en la Tierra. Wow, gloria a Dios, gracias Señor, gracias Padre, bendice, bendice a estos hermanos Señor.
Te pido sanidad, te pido milagros sobre estos huesos Señor, yo veo huesos que están secos, secos de llorar porque el llanto prolongado seca los huesos, también me dice el Señor. Ahora Padre te pido que humedezcas estos huesos, que hidrates a estos huesos Padre, en el nombre de Jesús y que impartas fuerza por estas palabras y por tu Espíritu, en el nombre de Jesús, sobre esos huesos débiles, frágiles Señor. Hidrata ahora por tu Palabra estos huesos secos Señor en el nombre de Jesús, amén; no sé qué tiene que ver, pero veo a un perro que juega con un hueso, el Señor me dice que hasta para los perros los huesos son importantes, es decir, hasta los animales saben la importancia de los huesos y muchas veces nosotros no.
Observemos el comportamiento de la naturaleza, plantas y animales para aprender de Dios, porque podemos ver muchas de las cosas que habla la Biblia y que el Señor enseña a través de palabra profética, reflejado en la naturaleza, es decir en la Tierra, en las plantas, en los animales y demás. wow, gloria a Dios, gracias Señor, bueno duerman con esto, digieran esto y también es muy bueno el caldo de huesos me dice el Espíritu Santo, el caldo de huesos es bueno para fortalecer al cuerpo y a los huesos.
Me enseña ahora el Espíritu de Dios, wow, en realidad los huesos son como oro, son tan valiosos y muchas veces son menospreciados, me dice el Señor y por eso habla de estas cosas, estos detalles y los huesos se componen de cosas muy importantes para el cuerpo a su vez y el Espíritu me indica que estudien sobre esto, que investiguen sobre esto porque todo es importante en el Reino de Dios y todo está conectado, gracias Señor, aleluya, gracias Padre.
Muy bien, le vamos a dar un cierre acá, teniendo en cuenta que esto solamente es una parte del conocimiento sobre este área nada más, muy pequeñita. Mantengámonos en oración para que el Señor siga revelando más sobre todo esto, sobre salud, alimentación, trayendo luz sobre lo que está escrito, que aprendamos a interpretarlo que nos revele su Palabra, los secretos bíblicos y los secretos celestiales aún más.
Ustedes oren por lo que les gustaría que el Señor hable y Él va a darme los temas que Él considere que sean necesarios y edificativos para ustedes en general. Oren sobre todo esto, estudien primeramente en la Biblia sobre todo esto y en segundo lugar pregúntenle al Espíritu Santo, dónde estudiar científicamente sobre lo que el Señor habla y sobre lo que está escrito en la Biblia, porque no todas las fuentes que son científicas dicen la verdad, entonces la guía es el Espíritu Santo, pregúntenle al Espíritu Santo dónde puedo leer o investigar o aprender sobre esto que hablaste hoy; o sobre lo que la Biblia dice, gloria a Dios.
Bueno los dejamos con varias inquietudes, pregúntenle al Espíritu Santo también después de esto si hay algo de que arrepentirse, les dije, si hay que pedir perdón en el nombre de la línea generacional y por qué específicamente, si hay algún pecado inconsciente que estén llevando a cabo que esté abriendo la puerta para enfermarlos en los huesos, humillense delante del Señor, pidan perdón, pidan dirección en este área y reciban ese perdón y reciban sanidad y libertad en el nombre de Jesús. Amén, bueno muchos saludos hermanos nos conectamos en un par de días para la gloria de Dios.