Traducciónes: inglés
Hijitos, dice el Señor, ¿ustedes han visto lo que sucede con Israel? Si no han puesto su mirada en él, eso es lo que deben hacer, porque así lo anuncié desde tiempos antiguos: todos los ojos iban a mirar hacia el oriente. Y eso es lo que estoy haciendo en este tiempo: llamo la atención para que cada nación de la tierra dirija su mirada a Israel, porque a Jacob es a quien elegí.
[Isaías 41:8-9] Pero tú, Israel, siervo mío eres; tú, Jacob, a quien yo escogí, descendencia de Abraham mi amigo. Porque te tomé de los confines de la tierra, y de tierras lejanas te llamé, y te dije: Mi siervo eres tú; te escogí, y no te deseché.
Amados míos, dice el Señor, presten atención a esta trompeta, escuchen este llamado, porque estoy levantando la voz y rugiendo como león. En estos tiempos proféticos estoy hablando acerca de mi elección, acerca de mi elegido, que fue, es y sigue siendo Israel.
Ustedes no entienden muchas cosas que Yo sí entiendo, dice Dios. Ustedes no pueden ver el tablero de ajedrez y las fichas que Yo estoy moviendo, pero Yo sí las veo perfectamente, desde una distancia adecuada y desde un lugar privilegiado.
Por lo tanto, ustedes ven parcialmente lo que está sucediendo en estos últimos días acerca de Israel, mi siervo. Entienden parcialmente y también suponen parcialmente. Por parte entienden, y por parte suponen, pero en la mayoría de los casos, lo que están suponiendo acerca de mi siervo Israel está equivocado, está mal, es erróneo y deben corregirse.
Estoy evaluando a las naciones y a mis hijos, dice el Señor. Estoy pesando en mi balanza a cada nación de la tierra en este tiempo profético, donde lo que está escrito en la Escritura sobre Israel, mi pueblo elegido, se cumple del principio al fin.
Estoy pesando en mi balanza a cada nación de la tierra, para ver qué camino toma, qué posición elige y cómo trata a mi pueblo, al que Yo escogí, al que Yo llamé y al que predestiné para que sea mi elección para siempre.
Hijitos, dice Dios, estoy pesando cada corazón para ver lo que piensa acerca de mi siervo Israel. Estoy escuchando lo que sus corazones están pensando sobre él y las murmuraciones no solamente de los líderes mundiales que se confabulan en contra de mi escogido, como dice el Salmo 83, sino también de los que son míos, de mis hijos.
Hay muchas cosas de lo que está pasando que ustedes no entienden, y en parte es porque no estudian lo que está escrito en las Escrituras acerca de mi elegido, acerca de Jacob, a quien Yo escogí y a quien nunca deseché y nunca voy a desechar.
Muchos de ustedes están equivocados, igual que todas las naciones de la tierra que se están levantando contra él, sin saber contra quién van ni con quién se están metiendo.
[Salmos 83:2-5] Porque he aquí que rugen tus enemigos, y los que te aborrecen alzan cabeza. Contra tu pueblo han consultado astuta y secretamente, y han entrado en consejo contra tus protegidos. Han dicho: venid, y destruyámoslos para que no sean nación, y no haya más memoria del nombre de Israel. Porque se confabulan de corazón a una, contra ti han hecho alianza.
Esto es lo que está sucediendo en estos días, amigos míos, dice Dios. Hay confabulación de naciones.
Noelia: Veo ahora en una visión simbólica líderes mundiales sentados en un círculo que rodea el país de Israel. Están sentados en tronos de jueces, con martillos en las manos, y el Señor me revela que ellos juzgan mal a Israel, mientras que sus enemigos se levantan como leones para devorarlo y lamber lo que sea que quede de él.
Hijitos, dice el Señor, toda nación se levanta contra Israel, porque así está escrito que tiene que ser, y así está siendo. Pero voy a juzgar a todos estos pueblos que vienen contra mi escogido y que no tienen misericordia. Si fuera por ellos, Israel ya hubiera desaparecido del mapa.
Hay muchas cosas que se confabulan en contra de él, dice el Señor, pero Yo escucho y también juzgo, y Yo soy un juez justo que no deja pasar desapercibido el mal ante mis ojos.
Todo lo que ellos están diciendo, todo lo que están haciendo, todas las firmas que están colocando en contra de Israel, todo está siendo pesado en mi balanza perfecta y justa, y he aquí que hay consecuencias para estas naciones que se levantan contra mi pueblo escogido. He aquí que salen juicios contra estas naciones que se confabulan para levantar la bandera de Palestina en la tierra que Yo le di a Abraham, a Isaac y a Jacob.
Hijitos, dice el Señor, todo esto tiene que pasar. Todo esto tiene que darse. Todo esto es parte de lo que ya está escrito desde tiempos antiguos.
Ustedes no tienen por qué maravillarse y asombrarse si conocen lo que está escrito. Pero sí tienen que orar, porque viene juicio contra todo aquel que se levanta contra Isaac, contra todo aquel que se levanta contra Jacob, mi escogido, contra todo aquel que viene contra Abraham, mi amigo.
Hijitos míos, oren, dice Dios, porque he pesado en la balanza las decisiones que estas naciones han tomado y están tomando en contra de la nación de Israel, y vengo contra ellas. Yo también golpeo mi martillo, pero mi martillo es justo y toma todo en cuenta: lo que se ve, lo que se hace, lo que se dice, y también lo que ustedes no pueden ver y de lo que no están al tanto, pero Yo sí estoy al tanto.
Amigos míos, dice el Señor, Israel es la copa que hace temblar a todos los pueblos. Israel es la piedra pesada contra todos los pueblos de la tierra. Esto está escrito.
[Zacarías 12:2-3] He aquí yo pongo a Jerusalén por copa que hará temblar a todos los pueblos de alrededor contra Judá, en el sitio contra Jerusalén. Y en aquel día yo pondré a Jerusalén por piedra pesada a todos los pueblos; todos los que se la cargaren serán despedazados, bien que todas las naciones de la tierra se juntarán contra ella.
Noelia: El Señor dice que, para que esta palabra se cumpla, tiene que suceder lo que hoy está sucediendo. Y si bien está escrito que todos los pueblos odiarían a Israel, Él va a juzgar a todos los que se dispusieron a odiarlo. Así como cuando el Señor utilizó a Babilonia para juzgar a Israel por su pecado y después juzgó a Babilonia por su propio pecado, así será con toda nación que se levanta contra su elegido.
Hijitos, dice el Señor, ¿acaso ustedes dejan de amar a sus hijos cuando se rebelan contra ustedes? ¿Acaso una madre olvida al hijo que dio a luz? Yo tampoco me voy a olvidar nunca del pueblo que Yo escogí, que Yo rescaté, del cual Yo fui padre. Así como una madre no se olvida de su hijo, Yo tampoco me olvido de mi hijo, al cual Yo escogí.
Abran bien los ojos y miren al oriente. Abran los ojos y pónganse largavistas espirituales para mirar lo que va a acontecer de ese lado del planeta, porque viene división, y así como repartieron mis vestidos, dice Jesús, así repartirán la tierra de Israel. Así será y así tiene que suceder, para que se cumpla lo que está escrito.
Noelia: Veo cómo las naciones siguen levantándose una a una en contra de Israel, incluso aquellas que antes tenían una postura a su favor, para que Israel se quede solo y su único defensor sea Dios en el final de los días, y se cumpla Zacarías capítulo 12, donde Dios toma venganza contra todas esas naciones que cargaron contra Israel.
Hijitos, dice el Señor, presten atención y miren al oriente, porque hay guerra, hay destrucción, hay ruina, hay hambre, hay devastación, hay división.
Noelia: Veo la tierra de Israel dividida, y el Señor vuelve a traerme a la mente el pasaje donde los soldados repartieron los vestidos de Jesús cuando lo estaban crucificando.
Hijitos, dice el Señor, oren e intercedan, porque gran angustia le viene a Jacob. Gran castigo le viene a mi hijo por causa de su rebelión, porque aunque Yo amo a mis hijos, los disciplino, y soy un Dios justo que cumple con su palabra y con su justicia, un Dios que no puede negarse a sí mismo y que no hace acepción de personas. Y el hecho de que Yo haya elegido a mi hijo de entre todos los pueblos de la tierra no quiere decir que no haré justicia contra sus pecados.
Hijitos, dice el Señor, oren e intercedan.
Noelia: Veo a Netanyahu, y su corazón físico está a punto de quebrarse. Aunque es un hombre fuerte, está debilitado. Lo veo enfermo, débil, desgastado. Su corazón físico está sufriendo demasiado, a punto de que le pase algo grave.
El Señor dice que intercedamos por este hombre. Muchos de ustedes habían empezado a interceder por Israel y por estos conflictos de hoy en día, pero después dejaron de hacerlo. Por eso el Señor vuelve a hacer un llamado y repite que los creyentes tenemos que prestar atención a lo que pasa allá e interceder, porque Israel es clave.
Israel es el ombligo de la tierra, el epicentro desde donde ya comenzó el terremoto final de los últimos días. No podemos dejar de prestar atención a lo que sucede allá y a los pasos que se están dando. No podemos dejar de observar cómo se arma el rompecabezas final de los últimos días, porque ahí fue el comienzo y ahí será el final.
El Señor me hace saber que fue en ese lugar donde Él creó al hombre y a la mujer a su imagen en el principio. Israel tiene que ver con el comienzo de la humanidad y también con el final. Israel es el principio y el final. Es como una piedra que se tira en el agua y genera ondas expansivas que impactan en el resto del mundo.
El Señor dice que la iglesia es negligente cuando no mira a Israel, cuando no observa lo que sucede allí, cuando no sigue de cerca los acontecimientos y no los compara con la Biblia. El Señor dice que no podemos hacernos los ciegos y que tenemos que dirigir nuestra vista al Medio Oriente, orar para que lo que está escrito se cumpla e interceder por lo que el Espíritu Santo nos muestre.
El Señor llama nuevamente, y veo una alerta roja por Netanyahu y por la división de la tierra de Israel. Muchos no ven la creación del Estado de Palestina como una división de Israel, porque no lo entienden bíblicamente, porque no entienden que toda esa tierra Dios se la entregó a Abraham y a su descendencia para siempre.
Aunque hoy no toda esa tierra le pertenezca a Israel, por causa de la promesa sí le pertenece. Por eso Dios llama a la creación del Estado de Palestina división de la tierra de Israel. Por eso Dios habla de la repartición de la tierra de Israel como la repartición de los vestidos de Jesús, porque lo ve desde el punto de vista de la promesa que Él hizo a Abraham y a su descendencia.
Es una alerta roja que Dios está dando para que su pueblo dirija la mirada hacia allá, entienda lo que está pasando, lea lo que va a suceder e interceda acorde a eso.
Hijitos, oren, dice el Señor. Oren por entendimiento. Oren para que Yo les aclare lo que Israel representa para mí en primer lugar y por qué es mi hijo y mi elegido. Es por causa de los padres, por causa de Abraham y de la promesa. Entiendan lo que significa la elección de este pueblo, que no es por sus propios méritos, sino por la elección de sus padres en primer lugar.
[Deuteronomio 10:15] Solamente de tus padres se agradó Jehová para amarlos, y escogió su descendencia después de ellos, a vosotros, de entre todos los pueblos, como en este día.
Es por causa de los padres que Yo elegí a este pueblo, dice el Señor. No es porque sea un pueblo más numeroso que los otros pueblos. Es un pueblo pequeñito en comparación con otros, pero Yo amé a sus padres, y por mi amor hacia ellos es mi elección.
[Deuteronomio 7:6-7] Porque tú eres pueblo santo para Jehová tu Dios; Jehová tu Dios te ha escogido para serle un pueblo especial, más que todos los pueblos que están sobre la tierra. No por ser vosotros más que todos los pueblos os ha querido Jehová y os ha escogido, pues vosotros erais el más insignificante de todos los pueblos.
Lean y entiendan que esa elección nunca fue cancelada, dice el Señor, que esa elección nunca fue cambiada, que nunca he reemplazado a Jacob por otro pueblo, que la elección es para siempre y que Yo soy fiel con lo que digo.
Amados míos, dice el Señor, hay un movimiento de odio que se levanta en todo el mundo, un resentimiento contra mi elegido, y así como odiaron a Jesús, quien también fue mi elegido, así como repartieron sus vestidos, así como lo dejaron de lado, lo insultaron, lo vituperaron, se burlaron de él, lo maltrataron y lo juzgaron injustamente, erróneamente, diabólicamente, lo mismo está sucediendo hoy con Israel, mi elegido. Se repite la historia.
Entiendan de lo que hablo, dice el Señor. Abran sus corazones y no coman más basura de lo que les venden las noticias. Rechacen este movimiento demoníaco y esta doctrina de demonios que aún se mueve entre los escogidos para que vengan y se levanten contra mi elección.
Muchos están siendo convencidos, dice el Señor. Muchos de los que deberían levantar bandera por Israel la bajan. Muchos están siguiendo la corriente de este movimiento antisemita que se levanta con fuerza hasta los confines de la tierra.
Y aunque esto tiene que ser así para que se cumpla la Escritura y todos los pueblos vengan contra Israel en los últimos días, de igual manera hay un remanente que tiene que entender y levantar esa bandera bien alto, sin importar las consecuencias.
Ustedes son ese remanente que tiene que ser entendido de los tiempos donde están caminando, dice el Señor, que tienen que estar a favor de mi elección y no en contra.
No se equivoquen, porque estoy pesando en mi balanza la elección que cada uno de ustedes está tomando. Estoy escuchando lo que están pensando en sus corazones acerca de mi escogido, dice Dios Padre, así como escuchaba los corazones de los judíos mientras crucificaban a mi escogido. Y muchos se están equivocando, están errando, se están torciendo, se están desviando y están hablando en contra de Israel como los que no saben de lo que hablan.
No se equivoque, pueblo mío, dice el Señor. Vuelvan a lo que está escrito y entiendan. Vuelvan a leer las Escrituras y pídanme entender. No sea que se encuentren dando coces contra el aguijón. No sea que se estén levantando en contra de mí cuando se levantan en contra de Israel, mi escogido.
Oh, amados míos, dice el Señor, viene guerra a las naciones que se levantan en contra de él. Viene castigo y juicio contra Francia, caudillo que levanta rebelión contra mi pueblo.
Noelia: Veo a Emmanuel Macron en un caballo, como un caudillo que levanta y agita a otras naciones para que vayan en contra de Israel.
Francia va al frente y lidera, dice el Señor, agitando a las naciones que estaban indecisas y no sabían qué posición tomar. Francia es culpable, porque ha convencido a varias naciones con argumentos diabólicos, los mismos argumentos que predicaba Hitler y otros cabecillas que se levantaron en contra de una raza. Francia es culpable por agitar las aguas.
Noelia: Veo a Macron moviendo las manos y agitando a las otras naciones. «Vamos, vamos en contra de ellos. Vamos en contra de estos asesinos», dice él, sirviendo a Satanás.
El Señor me dice que hay una agenda masónica que Macron tiene que ejecutar. Por eso él va adelante, sin dudar ni vacilar en levantarse en contra de Israel. Por eso agita a la ONU para que corten la cabeza de Netanyahu.
Por cuanto te levantaste contra mí, dice el Señor, Yo también me levanto contra ti y corto tu cabeza.
Noelia: El Señor dice que aunque ellos digan que quieren paz para Israel y Gaza, en realidad quieren guerra en contra de Israel. Pero esa guerra que ellos están agitando contra Israel es la guerra que el Señor envía contra ellos. Es la guerra que viene a Europa. Esa espada que Francia ha clavado en la tierra de Israel es la espada que se le viene en contra.
El Señor dice que para todos los que se levanten en contra de su ungido, eso mismo es lo que vendrá en contra de ellos.
Dios insiste en que oremos por Europa, porque sigue viniéndose abajo. Como el Señor lo anunció hace tiempo, Europa se agita y se revoluciona. Europa está perdida, ha perdido su norte, y en parte es porque se deja llevar por lo que le conviene. Algunos dicen que son neutrales, pero al ser neutrales están a favor de lo que no tienen que estar a favor y están en contra de lo que no tienen que estar en contra.
El Señor dice que Europa, en parte, se lava las manos y sabe que está yendo injustamente en contra de Israel, pero igual lo hace, porque le conviene, porque quiere quedar bien con el resto de las naciones y porque ve para dónde va la mayoría.
La mayoría de los países de Europa saben que están haciendo mal en votar en contra de Israel, pero se están lavando las manos, igual que Pilato cuando sabía que estaba haciendo mal en entregar a Jesús para que lo crucifiquen los judíos.
Se están lavando las manos, dice el Señor, y saben que se están lavando las manos. Le están dando la espalda al que tiene la razón. Por lo tanto, esa injusticia que ellos están haciendo es la que se les está viniendo encima.
Noelia: Dios dice que antes la atención estaba en las Américas, por lo mal que estaban, por lo abajo que venían, pero ahora la atención está y va a seguir estando cada vez más del lado de Europa y de Asia. Las cosas cambian de lugar, se revierten, y las bombas van a seguir cayendo de ese lado del planeta.
Ahora veo una copa que Dios ha colocado en Europa y Asia, y hace temblar esas tierras. Esa copa es Israel, y sigue derramándose, trayendo más agitación y haciendo que unos se levanten contra otros.
Amados míos, dice el Señor, no se confundan, porque Yo estoy en contra de los que se levantan contra Israel y doy gracia a todos los que lo aman, a todos los que interceden por él y a todos los que lo bendicen.
[Génesis 12:3] Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.
[Números 24:9] Benditos los que te bendijeren, y malditos los que te maldijeren.
Elijan postura y elijan bien. Recapaciten, porque muchos de ustedes se están equivocando y siguen la corriente del mundo, sin entender que tienen que formar parte de la minoría que está a favor y no en contra de este pueblo, porque estoy juzgando y voy a seguir juzgando. Abran sus ojos y miren lo que voy a hacer.
Oren por sus naciones si están hablando en contra de Israel y si están votando en contra de Israel y están levantando la bandera de Palestina en vez de la bandera de Israel, dice el Señor. Oren, ayunen e intercedan, como lo hacía Daniel por su pueblo, y pidan perdón por el odio antisemita en sus propias casas.
Noelia: El Señor me revela que debemos orar, ayunar e interceder no solo por nuestros países, sino también por nuestros hogares si allí hay odio hacia Israel, si se habla mal de Israel, si se murmura en contra de Israel, si se maldice a Israel, a Netanyahu y a su gabinete de guerra.
Cuidado, dice el Señor, porque pueden estar bien en muchas áreas, pero si están fallando en esto, la maldición de Génesis caerá sobre sus cabezas.
Los amo, hijitos, dice el Señor, pero mi pueblo perece por falta de conocimiento, y hoy estoy aquí para levantar la bandera de Israel, que se está cayendo en la congregación de los santos. Hoy estoy aquí para recordarles lo que está escrito y que nada ha cambiado.
Oren por los judíos, dice Dios. Oren para que se conviertan y sus ojos sean abiertos, porque hay un porcentaje que se va a convertir antes de que venga el Deseado de las naciones, y esa conversión que ustedes van a ver de una forma más amplia será en parte por causa de su intercesión y de sus oraciones.
Mi pueblo debería estar ayunando e intercediendo por ellos en vez de condenarlos, dice Dios, pero se ha olvidado nuevamente de lo que está escrito sobre ellos: que hay un velo que tienen colocado hoy y que será quitado a su tiempo.
[2 Corintios 3:14-16] Pero el entendimiento de ellos se embotó; porque hasta el día de hoy, cuando leen el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual por Cristo es quitado. Y aun hasta el día de hoy, cuando se lee a Moisés, el velo está puesto sobre el corazón de ellos. Pero cuando se conviertan al Señor, el velo se quitará.
Pero gracias a ese velo que hoy tienen, ustedes pueden ser beneficiarios de formar parte de ese olivo, estando injertados en él. Gracias a que ellos están velados, los gentiles están viniendo a la salvación. Y ustedes se olvidan de que gracias a ellos han entrado, maldiciéndolos, provocándolos y burlándose de ellos.
Cuidado, dice Dios, porque el que se burla de un judío se burla de Jesús, el judío de los judíos, y el que se burla de Jesús se burla de mí, porque Yo los elegí.
Noelia: Veo muchas mujeres que empiezan a interceder por Israel en sus casas, cuando están solas, y que forman grupos de intercesión con otras mujeres. El Señor está llamando a esta tarea y dice que hay un pueblo cristiano que tiene que levantarse a interceder seriamente por Israel.
Este es un llamado del Señor a que la iglesia se reacomode y no se deje llevar por lo que dice el mundo en contra de Israel, a que la iglesia se mantenga firme en su postura sobre lo que Israel representa para Dios y para nosotros en estos últimos días.
Este es un llamado del Señor para que la iglesia estudie este tema y pida entendimiento en estos últimos días, para no caer en el mismo error en el que están cayendo todas las naciones de la tierra, que no conocen verdaderamente a Dios en este sentido y no entienden el misterio de Israel en este tiempo.
El Señor me dice que hay guerra que se desata, y veo a Europa. El Señor dice que viene más guerra a Europa. Europa está confundida. Veo distintos países de Europa levantando la espada, pero ni siquiera saben contra quién están peleando. Es como alguien que está confundido, moviendo la espada en todas direcciones sin saber a quién atacar ni de quién defenderse, sin distinguir entre amigo y enemigo.
El Señor dice que Él ha permitido que este espíritu de confusión venga sobre Europa, para que no sepan cómo atacar, ni cómo defenderse, ni cómo levantar muros. Están tan confundidos que no saben cómo protegerse, ni siquiera contra qué enemigo tienen que levantar las armas. Es un espíritu de confusión que el Señor ha enviado a esa zona de la tierra por haber elegido de manera confusa su postura hacia Israel.
Dios también muestra esto para que su pueblo ore e interceda por estos temas, y se prepare y entienda las consecuencias de ir en contra de lo que Dios eligió y ama.
Dios dice que no tengamos vergüenza, que no seamos cobardes y que defendamos a Israel cuando alguien viene a hablarnos mal de él, porque sus ángeles están anotando lo que decimos y lo que dejamos de decir.
Hay un Israel físico y hay un Israel espiritual, y nosotros, los que no somos judíos por sangre, somos el Israel espiritual del Señor, junto con los judíos por sangre que han nacido de nuevo en el nombre de Jesús.
Ahora veo la bandera de Israel siendo despedazada y desmenuzada, mordida por perros. Israel está siendo castigado y ultrajado.
Al final de los tiempos, todo esto que se le está haciendo a Israel será vengado e Israel va a ser restaurado y glorificado, pero primero tiene que sufrir como Jesús, que fue llevado al matadero y padeció las mismas cosas que Israel tiene que padecer en estos últimos días antes de ver la gloria.
Ahora vuelvo a ver a Emmanuel Macron, y lo veo en un caballo, como Napoleón, con un espíritu imperialista, extendiendo su espada hacia el país de Israel y agitando a las otras naciones para que también se levanten contra él.
Esto traerá consecuencias para Francia, dice el Señor. Francia también va a entrar en guerra y sobre Francia también van a caer bombas, porque el que quiere guerra por otra nación, guerra atrae para su propia tierra.
[Mateo 26:52] Entonces Jesús le dijo: Vuelve tu espada a su lugar; porque todos los que tomen espada, a espada perecerán.
Dios es justo y ejecutará su justicia contra las naciones que se levantan en contra de su pueblo.
Así que oremos por esto y para que el Señor siga revelando los planes escondidos de estos reyes y naciones. Amén.